La recuperación de estas rejillas que habían sido hurtadas desde semanas atrás en el Instituto Técnico Ambiental, se dio gracias a operativos de registro y control adelantados por los Gestores de Seguridad y Convivencia Ciudadana con apoyo de la Policía Nacional.
La diligencia que permitió ubicar los elementos hurtados, que fueron plenamente identificados por el rector, se adelantó en una ‘chaterrería’ ubicada en el barrio La Campiña, hasta donde llegaron los gestores adscritos a la Secretaría de Gobierno.
Gracias a la denuncia instaurada por el rector Servando González, el pasado sábado se realizó el procedimiento de captura del propietario del establecimiento, quien fue puesto a disposición de la autoridad competente por el delito de receptación.
“La ciudad está teniendo inconvenientes por los hurtos de rejillas y otros elementos del sistema de alcantarillado, de aguas lluvias y del alumbrado público. Le estamos haciendo frente a esta situación e incrementaremos los controles para judicializar a quienes estén comprando estos elementos hurtados”, destacó la secretaria de gobierno, Karen López.
La invitación por parte de la administración municipal es a los propietarios de las denominadas ‘chatarrerías’, para que verifiquen la procedencia de elementos que lleguen para la compra, y así evitar inconvenientes con las autoridades.
