Unidad de Búsqueda recuperó cinco cuerpos no identificados del cementerio de Sácama. Casanare

Las labores se realizaron entre el 20 y 24 agosto de 2024, cuando los equipos forenses verificaron las bóvedas que fueron señaladas previamente como posibles lugares de inhumación de cuerpos no identificados.

Una familia casanareña participó en esta acción humanitaria, en la que uno de los cuerpos recuperados, se presume coincide con la identidad de su ser querido desaparecido.

Entre el 20 y 24 de agosto de 2024, la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, intervino el cementerio municipal en Sácama, Casanare, donde fueron recuperados cinco cuerpos no identificados, los cuáles estaban inhumados en bóvedas.

El equipo forense conformado por dos antropólogos, un topógrafo, una asistente criminalista y una investigadora integral utilizaron herramientas intrusivas en cada una de las bóvedas, las cuáles ya habían sido señaladas previamente, gracias a la investigación humanitaria y extrajudicial, en la cual, fueron clave los aportes de información entregados por integrantes de la Corporación Humanitaria Reencuentros.

Además de los aportes de información, se contó con la participación de dos integrantes de esta Corporación, quienes expresaron su intención de continuar colaborando en la búsqueda humanitaria de las personas dadas por desaparecidas en el departamento de Casanare.

«Es muy gratificante resaltar el trabajo en equipo y colectivo que realiza la Unidad con todas las organizaciones y tenemos claro que el proceso no termina en esta exhumación y que se pueden necesitar más detalles y más información para lograr la entrega digna y lograr el descanso de las familias buscadoras», concluyó Alonso Mendoza, integrante de la Corporación Humanitaria Reencuentros durante esta acción humanitaria.

La acción humanitaria, también, contó con la participación de la familia Flores, la que presentó la solicitud de búsqueda, luego de conocer sobre la existencia de la Entidad, que recopiló información y construyó una hipótesis que condujo hasta el cementerio de Sácama. Alli, y luego de varias horas de viaje, llegó la familia Flores para presenciar las acciones forenses y ser testigos de la recuperación del cuerpo de su ser querido. La mamá buscadora expresó que guarda la esperanza de encontrar a su hijo, quien desapareció cuando tenía apenas 14 años de edad.

Los cinco cuerpos recuperados fueron trasladados al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, a la que le corresponde cotejar las muestras biológicas e información entregada por la Unidad de Búsqueda para determinar la posible identidad de estos cuerpos.